Además de una conchaza impresionante, este remedo de grifo, con
tanque cisterna y surtidor incluido, representa ambos delitos, con el agravante
de que no está allí hace unos meses, sino hace muchos años, contando con la
venia de los alcaldes que pasaron por Comas hace un huevo de tiempo. Es con
esta gestión que el asunto toma un cariz diferente, que le agrega además de la
población cercana de miles de vecinos y pequeñas empresas, comercios y negocios
contiguos de una zona residencial de densidad alta, varios componentes de gran peligrosidad,
como son la presencia de una unidad policial dentro del local municipal, la
base de LOS HALCONES, cuerpo de policías que dicen luchar contra la
delincuencia sin mayores resultados hasta la fecha, la Central de Monitoreo de
Videovigilancia de Seguridad Ciudadana de Comas, los tanques de oxígeno de la
Planta Municipal para la lucha contra el Covid-19, y sobre todo el
local sindical del Frente Único de los tres sindicatos de la muni comeña.
El grifo en cuestión está allí para surtir de petróleo a las
unidades vehiculares municipales y, al parecer, pertenece a la empresa INVERSIONES SCOTT, proveedora de
combustible gracias a un contrato que se renueva casi casi automáticamente, ya
que no habría otra empresa que dé crédito a la muni comeña.
¿Será esa la razón por la que la
Municipalidad de Comas se “olvidó” de cumplir con la ley? Esa ley que
obliga a contar con la debida ITF (Inspección Técnica Favorable) de OSINERGMIN para poder contar legalmente con un
grifo de combustible, más allá de las razones prácticas del uso de este
clandestino y superpeligroso grifo, cuyo precario tanque instalado sobre una
endeble armazón metálica, se infringe el Código Penal en dos delitos: Contra la
Seguridad Pública y Delito de Peligro Común contra la sociedad.
Por otra parte, la irresponsabilidad de las autoridades ediles,
que permiten el funcionamiento del grifo de marras, no es exclusiva al despacho
diario y continuo del petróleo, si recordamos un poquito, debemos tener en
cuenta el Acta de Infracción Nº 1385-2020-SUNAFIL/ILM, que en uno de sus ítems señala la carencia de llaves termomagnéticas
en las áreas de Mantenimiento y los SS.HH. Por estas infracciones, la
Municipalidad de Comas fue multada con 10 UIT.
Otra infracción, considerada como MUY GRAVE, es la falta del Protocolo de Bioseguridad sanitaria en dicho
local municipal así como los demás anexos municipales de Comas, aquí hay varios
responsables, empezando por el alcalde Raúl Díaz Pérez, el GM Rubén Rivera Chumpitaz, el gerente de Servicios a la Ciudad,
Heráclides Salazar Córdova y, cómo no, el subgerente de Mantenimiento, César
Simón Huamaní, y por supuesto los 15 regidores que conforman el Concejo Municipal.
La continua y diaria violación de la ley por parte de los
funcionarios aludidos, así como el desprecio por la vida y patrimonio de los
que serían directamente agraviados con un siniestro de proporciones, se castiga
con penas entre los 6 a 15 años de carcelería.
Una verdadera bomba de tiempo, grifo clandestino, precario, letal
y mortífero.
Hemos dejado para el final, pero por eso no menos importante, al dueño de las instalaciones con las que opera este grifo informal y el subsecuente peligro para todos los involucrados, directa e indirectamente, en esta crónica de una tragedia anunciada. Nos referimos al propietario de la empresa INVERSIONES SCOTT, Scotty Álvarez Pérez.
No queremos dejar de mencionar que el funcionamiento del este grifo informal y clandestino es otra muestra más de los abusos de esta infame gestión, así como los diarios abusos que comete contra los vecinos, comerciantes y pequeños empresarios, la fiscalizadora municipal Bernardina Vásquez Garay y su constante abuso de autoridad y violación de domicilio de empresas y comercios con total impunidad, acompañada de otros indeseables como ella. Tampoco se quedan atrás los maleantes que dicen ser Inspectores de Transporte de COMAS, sarta de impresentables que son locadores de servicios, liderados por un miembro de la triada criminal que maneja el pingüe negocio de los mototaxis, Armando Tena Saavedra, antiguo compañero de trabajo del regidor Erick Mendo Marcelo, como instructores (auxiliares), en el colegio Santo Domingo.